La evolución del e-learning del AICC al xAPI ha sido un viaje largo y lleno de avances tecnológicos. Si estás interesado en entender cómo hemos llegado a los estándares actuales, es crucial conocer los hitos principales. Comenzamos con el estándar AICC, pasamos por SCORM y llegamos al avanzado xAPI, que junto a cmi5, redefine la forma en que experimentamos y registramos el aprendizaje.
AICC: Orígenes y limitaciones
El AICC, o Aviation Industry CBT Committee, fue establecido en 1988 para estandarizar los materiales y la tecnología de formación basada en ordenador en la industria de la aviación. Su principal contribución fue la «Guía de interoperabilidad CMI», que facilitó el intercambio de datos entre contenidos de e-learning y sistemas de gestión de aprendizaje (LMS) mediante el Protocolo de Comunicación AICC basado en HTTP (HACP).
Sin embargo, el AICC enfrentó varias limitaciones. Entre ellas, problemas con el scripting entre dominios y una falta de flexibilidad que no se adaptaba a los entornos modernos de e-learning. A pesar de estas limitaciones, el HACP de AICC sigue siendo soportado por muchos proveedores, especialmente en sistemas heredados y ciertas industrias específicas.
SCORM: Un paso adelante en la estandarización
Para abordar la necesidad de un método estandarizado de empaquetar y entregar contenido de e-learning, en 2001 se introdujo SCORM, desarrollado por la iniciativa de Aprendizaje Distribuido Avanzado (ADL). SCORM permite empaquetar el contenido en «Objetos de Contenido Compartibles» (SCO) y define cómo estos objetos se comunican con los LMS.
SCORM ha pasado por varias iteraciones, siendo SCORM 1.2 y SCORM 2004 las versiones más utilizadas. SCORM 2004 trajo mejoras en la secuenciación y navegación del contenido. Sin embargo, su dependencia de los navegadores web y sus limitaciones en entornos de aprendizaje móvil y offline llevaron a una disminución de su uso en favor de estándares más modernos.
xAPI: La evolución moderna del e-learning
Lanzado en 2013, xAPI, también conocido como Tin Can API, representa una evolución significativa en los estándares de e-learning. A diferencia de SCORM, xAPI no está limitado a navegadores web y LMS. Permite rastrear una amplia gama de actividades de aprendizaje en varias plataformas y dispositivos, incluyendo entornos móviles, offline y del mundo real.
Entre sus características clave, xAPI captura experiencias de aprendizaje en forma de «declaraciones» que consisten en un actor, un verbo y un objeto (por ejemplo, «Juan completó el curso»). Utiliza Almacenes de Registros de Aprendizaje (LRS) para almacenar y compartir datos de aprendizaje, permitiendo la interoperabilidad entre diferentes sistemas. Además, xAPI soporta la captura de datos de aprendizaje offline y su sincronización cuando el dispositivo se reconecta a internet.
xAPI ha sido adoptado por diversas organizaciones, incluido el Departamento de Defensa de EE. UU., debido a su flexibilidad y capacidad para rastrear actividades de aprendizaje complejas. Es especialmente útil para el aprendizaje móvil, simulaciones y aprendizaje experiencial.
cmi5: El compañero ideal de xAPI
Introducido en 2016, cmi5 surgió como un estándar complementario a xAPI. Fue desarrollado para abordar los desafíos de integrar xAPI con los LMS tradicionales. cmi5 define una estructura de curso y reglas específicas para la comunicación entre el contenido de e-learning y los LMS, asegurando la interoperabilidad y consistencia.
cmi5 especifica cómo deben empaquetarse los módulos xAPI para su entrega en LMS. Proporciona una manera estandarizada de lanzar cursos y capturar datos de aprendizaje, similar a SCORM pero con las capacidades avanzadas de xAPI. También incluye mecanismos para el intercambio seguro de datos entre cursos y LMS.
Conclusiones sobre la evolución de los estándares e-learning
La evolución del e-learning del AICC al xAPI refleja la creciente complejidad y diversidad de los entornos de aprendizaje. Mientras que AICC y SCORM sentaron las bases para la estandarización del e-learning, xAPI y cmi5 ofrecen la flexibilidad y el rastreo avanzado de datos necesarios para el aprendizaje moderno, móvil y experiencial. Estos estándares continúan jugando un papel crucial en la configuración del futuro de la educación y la formación.
Entender esta evolución no solo te proporciona una perspectiva histórica, sino que también te prepara para aprovechar las tecnologías actuales y futuras en el campo del e-learning. Así, puedes estar al tanto de cómo las herramientas y estándares han mejorado para ofrecer experiencias de aprendizaje más ricas y completas.
